Sensaciones de “guerra fría” entre proveedores de servicios “cloud”…
Leemos en la prensa especializada que la agencia de inteligencia ha elegido los servicios de AmazonAWS frente a la oferta “cloud” de IBM, en la contienda por un lucrativo contrato gubernamental alegando no ya razones de precio, como hubiera cabido esperar, sino debido a la “superior solución tecnológica” — una percepción que contrasta con la opinión que tiene IBM de sí misma como la empresa de soluciones tecnológicas para las Organizaciones Gubernamentales.
Esta auténtica revelación se hizo pública el viernes, cuando la US Gov. Accountability Office (GAO) publicó un informe parcialmente ofuscado en el que se enumeraban las razones por las cuáles los decisores se habían decantado por Amazon en lugar de IBM para la ejecución de un contrato de cloud privada valorado en unos seiscientos millones de dólares, y cómo IBM había rebatido la decisión (sin éxito, entendemos).
No obstante, el informe de la GAO admitió dos de las quejas de IBM relativas al precio percibido y las diferencias tecnológicas entre su solución y la propuesta por Amazon –que darían lugar a una versión algo menos estricta de los requerimientos hacia Amazon–, pero descartaba las demás alegaciones.
A partir de este informe, la CIA tiene 60 días para, o bien aceptar las recomendaciones de la GAO y reevaluar las propuestas, o bien quedarse con AWS.
El informe cita que, aunque el precio estimado por AmazonAWS para la solución era de $148M anuales, frente a los $94M de IBM, la CIA habría elegido la solución de Amazon debido a su sofisticación técnica: “Mientras que la solución de IBM ofrecía un coste estimado mejor para un período de cinco años, se determinó que esta ventaja se ve compensada y superada con creces por la superioridad técnica de la solución de Amazon”.
Por otro lado, aparentemente el precio citado por IBM tenía una serie de cláusulas adjuntas que preocuparon al decisor, quien dice haber “encontrado ‘serios riesgos en coste’ asociados a la propuesta de contrato por parte de IBM que indicaba que el proveedor podría [borrado]”.
Desconocemos qué podría decirse en el fragmento ahora [borrado], pero especulamos que se tratara de las típicas cláusulas insertas en los grandes contratos empresariales y que preveen cuotas adicionales en caso de incurrirse en gastos imprevistos durante la ejecución.
La tabla comparativa en cuestión es como sigue:
AmazonAWS vs IBM Cloud. © The Register, 2013
En conjunto, se deduce que IBM recibió una peor calificación debido a su propuesta indicaba que la solución cloud de IBM no proporciona auto-escalado para aplicaciones desarrolladas a medida por la CIA – a diferencia de Amazon AWS: “El equipo de evalución técnica y de gestión determinó también una debilidad significativa en el elemento escrito del subfactor técnico de la propuesta en la incapacidad de IBM de documentar claramente en su proposición técnica cómo IBM habría de modificar su cloud comercial existente para proporcionar las capacidades de auto-escalabilidad requeridas por la comunidad de Inteligencia”, indica el informe. IBM reclamó, pero la queja fue desestimada por la GAO.
Por otro lado, IBM argumentó también que las “caídas” de Amazon durante 2012 debieron haber sido consideradas por la agencia como factor para la elección de Amazon. La GAO no comparte este punto de vista, e indica que la agencia evaluó estos eventos pero “se concluyó que los informes y el conocimiento de las circunstancias que rodearon a los fallos de servicio no generan incertidumbre al cuantificar el desempeño pasado del proveedor”. Más aún, en defensa de la fiabilidad de Amazon, el informe cita una recomendación encarecida por parte del Jet Propulsion Laboratory, que indicó que no se había visto afectado por los problemas de servicio en DataCenters específicos de Amazon dado que “implementamos failover y balanceo elástico de carga, que es sencillo y muy asequible y totalmente merece la pena”.
Por otro lado, el informe remarca el hecho de que, aunque el precio de IBM resultaba ser inferior al ofrecido por Amazon, la tecnología que ofrece AWS simplemente no se consideró disponible en la oferta de IBM por parte del evaluador de la CIA. Un área concreta en la que IBM quedó rezagado era en las capacidad de auto-escalado para el entorno plataforma-como-servicio (PaaS) compuesto por miles de nodos que se necesitan para procesar los trabajos de MapReduce sobre datasets de alrededor de 100TB. Es decir, que la tecnología Hadoop de Amazon fue la que venció a IBM.
Por otro lado, dada el reciente anuncio de OpenStack como plataforma preferida por IBM para su tecnología SmartCloud, el hecho de que OpenStack está varios años por detrás de AWS en capacidades técnicas y la falta de crecimiento/apoyo significativo de SmartCloud, incluso considerando la absorción del proveedor SoftLayer y su “nube bare-metal”, juzgamos que la superioridad de AWS sobre IBM se va a mantener durante algún tiempo todavía.
La conclusión más importante de esta noticia es que la elección de AmazonAWS sobre IBM (incluso aunque más tarde se revirtiera), indica un hito muy significativo en la evolución de la industria de los servicios “cloud”, resultado de un cambio fundamental en la actitud de los gobiernos hacia los proveedores de servicios IT.